El juzgado de primera instancia nº 6 de Santander condena al Banco Santander a la devolución de 80.000 € a una familia que no recibió la información sobre el riesgo del producto a la hora realizar la inversión.
La entidad bancaria deberá realizar la devolución de la cantidad invertida más los intereses, los gastos y las comisiones cobradas de más. El banco ha sido condenado también en pagar las costas de dicha sentencia.
El fallo declara la nulidad del contrato de adquisición de los Valores que la familia contrato a finales del año 2007. Las claves para conseguir la nulidad se han basado en la falta de información sobre los riesgos de dicho producto al cliente. Comprendiendo que la información suministrada al cliente no era ni completa, ni comprensible para personas que no tenían la experiencia inversora suficiente.